Terapia infanto juvenil
“La terapia en la infancia y la adolescencia, supone, en muchos casos, el abordaje precoz de los problemas emocionales, mejorando el pronóstico y facilitando la mejoría”
Proceso y espacio terapeútico
Muchas veces, lo que más nos preocupa es el bienestar de los pequeños de la casa. Si has observado cambios en su comportamiento, tenéis conflictos frecuentes, o él/ella te lo ha pedido directamente, realizar un proceso de terapia en este momento vital puede resultar fundamental.
Con los niños y los adolescentes, es muy importante trabajar el vínculo para que resulte terapéutico. Generar un espacio de confianza, seguro, donde explorar por medio del juego y de la confianza, conocerse mejor y contar con herramientas para relacionarse con los demás.
Muchas veces, es la primera vez que experimentan emociones intensas, y conocer cómo gestionarlas y responder a ellas puede resultar un aspecto clave.
Además, hay que tener en mente que especialmente en edades tempranas, la implicación de los padres y convivientes en el proceso de terapia puede resultar fundamental.
Algunos beneficios de realizar un proceso de terapia en edades tempranas, son: aumentar el conocimiento, favorecer la construcción de una identidad sana, mejorar su autoestima y favorecer su desarrollo emocional. Además, se fomenta la autonomía, la resolución de problemas y la mejora en la habilidades sociales para que las relaciones con iguales y familiares sean más funcionales.
Algunos ejemplos de aspectos que se abordan en la terapia individual infanto-juvenil pueden ser:
- Problemas de comportamiento
- Dificultades en el rendimiento académico
- Miedos
- Fobias
- Ansiedad y estrés
- Problemas con el control de esfínteres: enuresis y encopresis
- Problemas de autoestima
- Dificultades en las relaciones sociales
- Problemas en el uso de las nuevas tecnologías
- Problemas en el ámbito académico
- Acoso escolar
- Bullying
- Proceso de separación de los padres
- Procesos de duelo
Terapia individual infanto-juvenil
Espacio seguro para los más pequeños y jóvenes de la casa. Supone un lugar en el que, a través del juego, los cuentos y otras técnicas adaptadas a este rango de edad, el paciente podrá expresarse de manera efectiva para resolver el motivo de consulta y alcanzar los objetivos terapéuticos que se hayan establecido.